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miércoles, 16 de marzo de 2016

Tomando impulso de nuevo...

Hoy leía en un blog al que sigo y de una persona, que a través de las redes sociales, es conocedor de mi emprendimiento. Y ha sido la última gota que me ha hecho, sacar una más de mis reflexiones, lo que me explotaba dentro y que había empezado a escribir ayer.
Como muchos sabréis, estoy en pleno lanzamiento de mi libro Mirando a la Montaña, que es el segundo publicado con Libros Mablaz además de otras tres colaboraciones en otras tantas antologías que comparto con otros autores. Y por ello gracias a Mablaz, como siempre.
Mirando a la Montaña nació con mucha fuerza. La montaña lo hizo brotar en 2013 y con la fortaleza de un ciclón, en el que se convirtieron mis manos, que describrían todo lo que mi interior trataba de decir, pues me ahogaba. Mirando a la Montaña, me ha hecho valorar el mundo, la vida, las vivencias, las experiencias, el ser quien yo realmente, quería ser. Y no lejana de estar presente en mi realidad, de ser consciente de las dificultades y los malos momentos, me ha hecho plasmar a través de él, un pequeño fruto más, del proyecto al que va dedicado: La Casuca del Piñal. 
Mirando a la Montaña y La Casuca del Piñal, son dos proyectos que convergen en uno, porque el uno sin el otro no tendría sentido. Mirando a la Montaña, no hubiera salido, si La Casuca del Piñal, se hubiera puesto ya en marcha, de eso estoy convencida. Los que me seguís o me habéis leído, sabéis que es uno de mis grandes motores. No penséis que el tiempo, que estoy muda, callo sin más, no. Ese tiempo estoy dedicándome a escribir, a releer, a encontrar nuevas maneras de reinventarme, de seguor emprendiendo.  Y sobre todo a intentar buscar soluciones, contactar con posibles salidas o ir al banco a ver si de una vez por todas, abren el grifo. Porque lo que tengo claro es que me encantaría que en un futuro no muy lejano, los emprendedores dejemos de ser las listas que engrosan los datos para decir que el empleo sube o baja. 
No quiero ser uno de esos números para decir que somos el futuro. O de esas personas, que aún dando de comer a los bancos, estos realmente no invierten en quiénes tienen que hacerlo. Porque parece ser que es mejor que nos monopolicen y seamos máquinas, que no saben mas que continuar la cadena de producción.
No. Quiero ser parte del futuro y no de manera conformista y resignada. Sino la que yo he venido a hacer. Me niego a ser una máquina. Pues tengo corazón y siento y me duele todo lo que me está pasando y sucede a mi alrededor. Ahora, además, que soy madurita en edad, ja, ja, qué contradicción. Ya no soy joven emprendedora. Pero... ¡si nunca he estado mejor que ahora!. Tengo las cosas claras y bien claras. Sé lo que quiero en la vida. Tengo una establidad emocional y sé hacer un montón de cosas que con 20 años era imposible. Además ya no me voy a quedar embazarada, con lo cual la seguridad social, no me tiene que pagar ni la baja maternal. O sea que a estas edades, ¡somos un chollo!
Ahora mismo, ya no es rabia lo que siento, ahora mismo quiero empeñarme por convicción. Porque como digo tantas veces, sí es posible transformar el mundo y mi realidad, a pesar de lo que me digan. Pero al final cada uno cuida de su parcelita y lo que en esta vida se sale de lo normal y no es lo que marcan... Vamos a cargárnoslo que molesta, y como digo en mi libro: Quizá hubiera sido mejor seguir como estaba...
Pues no señores, si yo hubiera seguido como estaba, quizá hoy no estaría escribiendo en este mi blog, porque no estaría ni presente en las filas de este mundo, porque un mal llamado cáncer, me había atacado ya, me tenía entre sus garras.
Me entristece tener que seguir diciendo que el sistema no funciona, (porque creo que hay personas que están haciendo muchos esfuerzos para que éste cambie y porque realmente se vayan viendo esas semillas verdes, como se dice ahora) pero lo que más me duele realmente es sentir que nos hacen ver a la vida injusta.
Digamos alto que quienes realmente están cometiendo las injusticias, son los que siguen viviendo igual de bien, que cuando la tan nombrada crisis empezó. Pero ¿a quién le está afectando? A los que gobiernan y no son buenos gestores... A los que les dan la posibilidad de gobernar, pero ninguno se quiere sentar a la mesa y "bajarse los pantalones"... A los que tienen la oportunidad de hacer algo por los emprendedores, pero siguen en sus poltronas... O a los que ya no se fían de los demás, no quieren apostar, porque otros salgamos adelante...
¿Por qué no nos dais una oportunidad? Y os lo demuestro. Porque me niego a resignarme y a pensar que esto no tiene salida. Soy emprendedora y luchadora y sin duda alguna, conseguiré poner en marcha lo que me propongo. Porque detrás de él no está sólo mi familia, sino un montón de personas, que esperan con ganas, entrar en ese hogar que por unos días o por un rato, pueda convertirse también en el suyo.
Publicar Mirando a la Montaña, saca de nuevo a la calle, las ganas de seguir emprendiendo de esta familia, que sigue luchando por su sueño, por coseguir el trabajo que va a dar sentido a su vida. Porque sigue presente cada día y con fuerza y con muchas ilusiones en el que ahora está siendo nuestro hogar alquilado.
Y por ello quiero seguir alzando la voz, a través de mi escritura que es lo que se me da bien y a lo que me ha ayudado Mirando a la Montaña. Y quiero compartirla contigo y que tú la compartas con otros y así, como las palabras encandenadas, conseguir que mi voz se siga oyendo y no calle, porque si calla, entonces ya no se escuchará oir hablar de mi Proyecto, que sin duda alguna tiene más sentido, más fuerza y necesidad que nunca de salir adelante. Porque... ¡¡¡Seguimos vivos!!!
Y no por orgullo, sino por convicción y por demostrar que a andar se aprende andando, pero también cayendo y después de caer, levantándose, para coger impulso de nuevo. Y ha llegado un momento, en el que como diría mi amiga Amalia, para atrás, ya, ni para coger impulso. 
Si te parece bien apoya nuestro emprendimiento con la difusión y aunque pienses que no haces nada, yo creo que hacemos mucho. Porque a emprendedora no me ganan, de eso estoy segura.
Y si te apetece participa en nuestro grupo de facebook https://www.facebook.com/groups/lacasucadelpinal/  y déjanos allí tus sugerencias, alguna iniciativa que favorezca a los emprendedores...
Porque si a algo hemos aprendido en este tiempo es a trabajar y a compartir con otros, porque cuando comenzamos este camino, aún teníamos mucho que aprender. ¡Eso seguro!
Y por último añadir, que Mirando a la Montaña, dice mucho de mí y de mi Proyecto, que llega en el momento justo para tomar impulso. Y por él me sigo levantando cada mañana... Con mucho cariño y deseando veros por mi casa, por vuestra casa, muy pronto.
Olga Hernández González

Mirando a la Montaña
Y en Librerías, Centros Comerciales, Amazon, El Corte Inglés, fnac,...
ISBN: 9788494444784

2 comentarios:

Alejandro Ahumada dijo...

Enhorabuena por seguir dando pasos siendo positiva y sin dejar que el miedo te afecte. Cada vez somos mas. ¡Gracias por estar!

Olga Hernández González dijo...

Sabes que seguimos adelante con lo que en su día nos planteamos. Hemos sido "unas marionetas" que el sistema quería moldear a su forma, pero como desde jóvenes hemos tenido siempre clara una palabra: UTOPIA y vemos que este mundo se puede convertir en algo muy bello, que ya lo es, pero a algunos no se lo parece... Tenemos que conseguirlo poniendo muestro pequeño granito de arena con nuestro proyecto. Desde luego sería más fácil, haber tirado la toalla ya. ¡Gracias por seguir a nuestro lado!